Finalmente sí hubo FIB 2013, tras unos días de mucha tensión, en los que varios periódicos aseguraban que el FIB no se celebraría, y que el montaje de escenarios e infraestructuras no se estaba llevando a cabo. Todo ello propició que mucha gente no se atreviera a comprar la entrada, lo que mirado desde un prisma positivo, se tradujo en más espacio para los que sí asistieron, mayor comodidad y mayor seguridad, lo que se pedía en ediciones extremadamente abarrotadas como la del 2011.
A continuación nuestras impresiones del festival: Lo mejor: - Woodkid. Sorprendentemente, el famoso director francés de videos Yoann Lemoine, ofreció el que quizás fue el mejor concierto del festival. Maravilloso. - Arctic Monkeys. Los de Alex Turner no fallan. Concierto plagado de hits (¿tienen alguna canción mala?) y con sorpresas, como 'Mardy Bum' en acústico. - Primal Scream. Una nueva actuación de los escoceses en el FIB. Otra clase magistral de Bobby Gillespie de como ser un gran frontman. - Beach House. Incomprendidos por gran parte del público de este festival, a los que apreciamos su música, nos encantaron, como siempre. Y da igual que no hablen con el público. Ya lo dijeron: "We are musicians, not cheerleaders".
- La Roux. No falló ni una nota. Las canciones de su disco debut siguen siendo hits, aunque las nuevas no pintan demasiado bien. - Hanni El Khatib. El angelino es muy bueno, pero aún sigue un paso por detrás de The Black Keys o The Black Box Revelation. - Childhood. Se habló mucho de Temples y Palma Violets, cuando se debería haber hablado de ellos. Espero que en el futuro las cosas se pongan en su sitio. Pintan muy bien. - Miles Kane. Ya lo demostró el año pasado: es un crack. - Deap Vally. Una guitarra electrica, una batería y modelitos muy sexys. Suficientes para llenar el escenario grande. Y es algo que hay que tener para telonear a Mumford and Sons y ahora a Queens of the Stone Age. - Jake Bugg. Muchísimo talento con tan solo 19 años. Aún le falta mucho repertorio para dar un gran concierto, pero el potencial lo tiene de sobras.
Lo peor: - Beady Eye. Todos sabíamos que el bueno de Oasis era Noel, pero Liam se encargó de confirmarlo con un concierto indigno de un cabeza de cartel. - Palma Violets. Una farsa, toda la publicidad que reciben es injusta. Muy malos. - Temples. Puedo confirmar que no son "los nuevos Tame Impala", como muchos escriben. Ni se acercan. - Hurts. Mucho ruido y pocas nueces. - Swim Deep. Insulsos. - Azealia Banks. La sobrevalorada rapera ni se presentó al festival. Hay que bajar esos humos. Además, Vince Power ya ha anunciando que el FIB seguirá adelante el próximo año y las entradas estarán a la venta en breve. Desde Inkult Magazine, esperamos estar ahí de nuevo. ¿Qué grupos nos deparará en su 20º Aniversario? ¿The Black Keys, The Strokes, Arcade Fire, Babyshambles...? Larga vida al FIB.
