La noche del 21 de noviembre, la Sala Apolo de Barcelona se convirtió en un refugio sonoro donde Julia Holter desplegó su universo musical con una elegancia hipnótica. Con una puesta en escena minimalista pero envolvente, la artista de Los Ángeles ofreció un concierto en el que lo etéreo y lo experimental se fundieron en perfecta armonía, creando un ambiente mágico e íntimo.
Desde las primeras notas de su teclado, el público se sumergió en la ensoñación característica de Holter, quien, acompañada de su banda, logró trasladar su sonido onírico al directo con una precisión casi cinematográfica. Su voz, delicada y profunda, flotaba sobre capas de sintetizadores, cuerdas y percusión, generando una atmósfera envolvente que mantenía a la audiencia en un estado de calma y fascinación.
El repertorio viajó por distintas etapas de su carrera, con momentos de introspección y explosiones de energía controlada. Cada pieza parecía construirse en el aire, creciendo en intensidad y emoción hasta alcanzar un clímax cautivador con la celebrada “I Feel You”.